Y ahora que no estás te busco, te llamo y hasta he llegado a echarte de menos. Yo que tanto te negué ya no encuentro la forma de vivir sin ti, la manera de comenzar mis días sin verte a mi lado, sin sentir tu respiración acariciando mi alma.
Me pregunto si tanto te ignoré para haber conseguido que me olvides; me pregunto si tan intenso fue el dolor que me causaste para haberte alejado a tantos kilómetros de mí... Me pregunto, como siempre, todo aquello que mis propias letras confirman y que en realidad yo misma creé.
El miedo que dejaste en mi piel ha hecho que me convierta en un imán que, con el polo opuesto, se acerca a quien quiere amar para salir directamente disparado al lado contrario. No hay forma de tocarte, de mirarte, de que me hagas temblar; no sé como aguantaré sin besarte, sin volver a acariciarte...
Por si el Universo te hace llegar mis palabras no quiero perder la oportunidad de pedirte que vuelvas a mí, que seas capaz de demostrarme lo equivocada que estoy; que no sea más la duda lo que me impida dar ese paso, ese empujón que me devolverá la ilusión por tenerte, por pensarte, por soñarte eternamente.
Aquí dejo mi corazón abierto para que recuerdes que no está completo sin ti, para que le devuelvas la energía que lo hace moverse y llenar mi cuerpo de deseo, de pasión, de fantasías que sólo sean posibles cuando estés a mi lado.
Aquí dejo mis manos para que sean el mejor lugar en el que puedas agarrarte si algún día tropiezas, para que te llenen de calor cuando el frío nos cale el corazón, para que sientas su suavidad recorrer cada centímetro de tu piel, cada milímetro de tu alma.
Aquí te dejo mi boca para darte siempre de beber, para calmar la sed de tus sueños ayudándote a hacerlos realidad, para besar tus labios mojados y recorrer con los míos tu ser.
Aquí te dejo la esperanza de que entiendas que tuve miedo, de que sepas que yo jamás te olvidé; el deseo de que levantes su mirada y la hagas colarse dentro de la mía, de que afines su voz y me diga lo que quiero oír.
Aquí te dejo el sueño de que cuando vuelvas a mí, sea para no volver a salir.
Aquí te dejo el sueño de que cuando vuelvas a mí, sea para no volver a salir.
No hay comentarios:
Publicar un comentario