martes, 7 de enero de 2014

Diario del Amor loco. VIII (2.0)


Te lo diré bajito para que nadie se entere, te lo contaré despacio para que tu corazón no se altere. Hoy quiero regalarte lo que nunca te di, todo aquello que, posiblemente, nunca más te entregaré...o sí, eso quién lo puede saber. Ahí está la magia de lo que hago, de lo que es para todos sin ser para nadie, que es para nadie siendo para todos... 

Qué podría esperar de un Amor al que considero loco; loco por su apariencia y sus actos, por sus palabras, por la forma en la que cada día se presenta. Quizás por eso llegas tú, para volver a darme lo que no quiero...amor...sí, pero loco, ese loco amor que hace que tu mirada me atraviese cada vez que vuelves la cara; que lleva a tus labios a estar junto a los míos en cada roce que me regalas con tu lengua; que estremece cada poro de mi piel cuando te siento aquí e intento colarme muy dentro de ti.

Pocos son los besos que se han dado nuestros labios en comparación con los que se han regalado nuestras dilatadas pupilas; he podido sentirte recorriendo cada parte de mi cuerpo; he tenido el placer de notar la humedad que provocas en mi, el calor del que me impregnas, los sueños de los que me dejas colgada. En el ayer...que ya no es hoy, pero que sigue estando grabado a fuego en mi retina, es donde guardo los días en los que no pudimos pasear por las calles de nuestras ilusiones, esos deseos que quizás no sean más que eso, que quién sabe si podrían ir más allá de lo que cuatro copas de más nos permiten compartir. 

Te alejas viendo en mí a quien no soy, por no quererme más, por no soñarme tanto, por no hacer más grande aquello que ya empezó siendo inmenso... Yo me quedo, no me gusta huir, pero no te voy a engañar, tampoco me acerco. Podría...pero no...no quiero más castillos que se desvanecen con la más mínima ráfaga de aire, no quiero enamorarme otra vez de lo que ya me enamoré, no quiero endulzarme más de lo que ya lo hice con tus besos, con las caricias de tus manos; no...no quiero ser más que ese sueño que soñarás mientras yo sueño que juntos soñamos lo que jamás podremos hacer realidad. 

No, ni somos ni seremos, pero déjame que hoy te regale mis letras, mi pasión y todo el amor que ayer quisiste entregarme; déjame darte las gracias por hacerme sentir amada, deseada y valorada; gracias por permitirme volar y por hacerme creer, aunque sólo fuese por unos segundos, que el amor a primera vista existe, que no hay nada imposible, y que, quizás, si no fuésemos más cobardes que valientes, más precavidos que aventureros, más coherentes que locos...ahora en vez de escribirte estaría simplemente comiéndote a besos, besando cada parte que quiero comerme de ti; estaría amándote sin frenos, frenando la coherencia que nos aleja; estaríamos disfrutando del placer de saber que los sueños, tan sólo se crean para que se puedan disfrutar, que los besos que quiero son sólo los que tu boca me quiera regalar, que la vida que tengo estaría mucho más viva si decidiese que tu rostro fuese lo que viese en cada despertar...

Tal vez...quién sabe, nadie lo sabe ni lo sabrá... Amor, amor loco que me despista de la verdad...


☯ Sonia Brúnar ☯

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